Política: La columna de Herman Vespa

La Enseñanza gremialmente, en manos del izquierdismo vernáculo.

Nadie en su sano juicio puede discutir que la enseñanza en nuestro Pais, a todos sus niveles, sufre un deterioro evidente, claro y que además compromete seriamente el futuro. Los Gobiernos anteriores por inercia, desconocimiento o meras concepciones ideológicas, dejaron que la misma llegara a extremos de verdadero desquicio. Y acá no se trata de opiniones, se trata de realidades, de números, de cifras, que avalan nuestra percepción y demuestran con creces lo aseverado de la realidad legada por el Frente Amplio. Claramente en la Enseñanza de toda Nación que se precie esta implícito su destino. Y lógicamente el nuestro. De las ultimas evaluaciones realizadas por el Codicen y tal como lo ha expresado su Presidente Robert Silva, las cifras surgidas son realmente alarmantes. En tal caso se aprecia que los aspirantes a Profesores en su enorme mayoría, no poseen comprensión lectora. Es decir, y para que quede claro, no saben leer Además hay un 38 % que tiene problemas de escritura y un 56 % en el lenguaje. De los estudiantes que ingresan a Formación Docente un 60% no posee las condiciones adecuadas para el ejercicio de esta auténtica vocación. En este caso puntual el apreciado lector imaginara, igual que el suscrito, que escolares podrán surgir con Maestros con semejantes limitaciones. Cual será el destino en su ciclo vital, y lógicamente su futuro con docentes, con voluntad admirable de ejercer su profesión, pero con carencias que imposibilitarían el desempeño de la misma. Y este deterioro que el actual Codicen esta tratando de volver a su cauce, a través de la Reforma Educativa, ha sufrido desde su mismo inicio toda la oposición posible. Ello no ha sido óbice para que la misma siga adelante. Los paros, las huelgas, las movilizaciones han sido cosas comunes en este periodo de Gobierno. A las cuales se tiene absolutamente derecho a ejecutarlas, pero que, transformadas en elementos de presión y de indisimulado proselitismo político partidario, dejan de tener seriedad y además no generan credibilidad de especie alguna. A título de somero ejemplo, lo ocurrido hace algunos meses en el IAVA. Donde la población pudo ser testigo privilegiado del histórico monumento educativo. Vandalizado por quienes se autodefinen estudiantes que irrespetuosamente, han supuesto que dicha Casa de Estudios es de su propiedad y en tal caso pasible de sufrir toda su atroz conducta. Las autoridades ejercieron democráticamente su función y las cosas volvieron a su cauce. Y la vergüenza que era el denominado salón gremial, dejo de serlo y volvió a su antigua prestancia. Además de lograr, de una vez por todas, que la impunidad de ciertos agitadores de profesión quedara por el camino. Sobre todo, cuando existe una autoridad que se ejerce, dentro de la Ley y la Constitución siempre. Vayamos a otro aspecto que particularmente entendemos como de los exponentes mayores del deterioro a que aludíamos. Década y media de gobiernos izquierdistas originaron una politización extrema de la Enseñanza toda. Que por otra parte es objetivo fundamental en gobiernos de tal signo ideológico. La verdad y esto hay que decirlo también ante la pasividad manifiesta, casi cómplice lamentablemente, de los hombres y mujeres de las divisas fundadoras. Que a vista y paciencia del escenario planteado permanecieron omisas y dejaron hacer. Hoy la Enseñanza, y es bueno reiterarlo, esta en manos del izquierdismo. Ademu, Fenapes, Afutu son ejemplos de nuestro aserto. Y veamos además la Universidad de la Republica. Nuestra principal Casa de Estudios. La misma que el Presidente Manuel Oribe el 27 de 1838, a partir de las Casa de Estudios Generales transforma por Decreto en la Universidad Mayor de la Republica. La misma acaba de anunciar la expedición de títulos universitarios precisamente, en lenguaje inclusivo. A despecho incluso de claras disposiciones al respecto, implementadas por la Real Academia Española. Es lo típico, una muestra mas de los extremos a los que es capaz de llegar la brutal ideologización de la Enseñanza. Tan cierto que los profesionales surgidos de sus aulas, seguramente adoctrinados durante toda su permanencia en dicha Casa de Estudios, saldrán de la misma.

En su mayoría seguramente influenciados por doctrinas que nos son las nuestras. Por el contrario, en las antípodas del ser nacional. Pero que todo ello poco vale ante el adoctrinamiento diario y pertinaz de docentes visceralmente alineados con el comunismo internacional. Y si estas, nuestras personales apreciaciones no se en tienden o convencen, nos permitimos la licencia de transcribir “Las siete fases hacia el totalitarismo” de George Orwell. Ensayista y novelista británico que nos lego pensamientos que mucho tienen que ver con nuestra realidad actual y lógicamente con nuestro futuro, sobre todo.
Fase1) Destruir la Libertad. Fase 2) Empobrecer la lengua, Fase 3) Abolir la verdad, Fase 4) Suprimir la Historia, Fase 5) Negar la Naturaleza, Fase 6) Propagar el odio, Fase 7) Aspirar al Imperio.  Cualquier similitud con nuestra realidad parece dolorosamente comprobable. Que lo entendamos, reaccionemos y nos unamos ante el enemigo común y absolutamente solapado estará el futuro Institucional, incluso. Nuestra Libertad, nuestra Democracia, el sagrado e inviolable porvenir de nuestros hijos y nietos.   
                 

Herman Vespa