MEDITACION PRACTICA: 4.- La Meditación Reflexiva
"Aprende que ningún esfuerzo, no el más pequeño -en la dirección correcta o equivocada- podrá desaparecer del mundo de las causas. Ni siquiera el humo desperdiciado queda sin huellas"
Religión y Filosofía02 de enero de 2025 Pedro del HumEl sendero de la meditación es como una aeronave que se apresta a volar. El primer paso que da es poner el motor en marcha y probar el motor durante un rato. En el segundo paso, cruza la pista una milla o dos. Luego, se eleva gradualmente hasta que llega al nivel o altitud en que quiere volar.
El mismo método deberán usar todos los que deseen meditar.
"Encuentra un lugar tranquilo en su casa, en su jardín, en la playa, o en las montañas, y acuda allí diariamente a una hora apropiada para usted.
Lleve libros inspiracionales, como:
1) El Bhagavad Gita.
2) Los Yoga Sutras de Patanjali.
3) Los Upanishads.
4) El Nuevo Testamento.
5) La Imitación de Cristo.
6) El Damapada.
7) Los Libros del Agni Yoga.
Abra en una página y lea un párrafo o toda la página, y luego trate de analizar y explayarse en cada línea, o palabra, tanto como usted pueda, como si estuviera dando una disertación y explicando esa parte del libro a sus amigos o estudiantes.
Después de hacer esto durante diez o quince minutos, tome su lápiz y papel y asiente sus hallazgos. Use el mismo párrafo o página durante una semana y luego compare sus notas para examinar su progreso desde muchos ángulos.
Al principio parece que usted entiende las cosas que está leyendo; luego viene un período en el que usted pasa por una sensación incómoda, porque siente que las palabras y expresiones tienen algo más profundo y usted realmente no penetra en el meollo.
El paso siguiente, que insume más tiempo y es más alegre, es el período en el que usted realmente examina su comprensión de los pensamientos expresados en relación con sus propias experiencias.
Esto le introduce en una vida tremendamente creativa. Usted enriquece su mente, la organiza, la limpia, y la apresta más para enfrentar las muchas facetas de la vida, fácilmente y con alegría.
Realice esta meditación reflexiva por lo menos durante un año porque, antes de empezar la meditación más avanzada, usted ha de establecer un ritmo sobre su tiempo, cuerpo y disposiciones anímicas, y ha de disciplinar su mente hasta cierto grado para que no se rebele cuando la someta a una nueva disciplina."
Después de la meditación reflexiva empieza el vuelo, y el hombre se eleva gradualmente hacia altitudes mayores, hacia horizontes mayores.
Estas clases de meditación son especialmente buenas para las personas que aún no están orientadas mentalmente y que son proclives a las experiencias astrales [digamos que "alucinaciones"]. Quienes tienen “experiencias psíquicas”, y ven colores, formas, u oyen muchas clases de voces, cuando empiecen la meditación han de detener, primero de todo, cualquier meditación que estén haciendo y empezar la meditación reflexiva como se da en este capítulo.
Al seguir los pasos de la meditación reflexiva durante un lapso, digamos un año o más, construirán un sendero desde el cerebro hacia la mente. Esta línea de comunicación se ampliará y agrandará, les ayudará grandemente en el futuro cuando hagan la meditación real, y les impedirá caer en los hechizos y miasmas astrales."
También debemos recordar que la meditación reflexiva es la etapa en la que el hombre empieza a elevarse. Esto significa que una de las cosas más importantes durante la meditación reflexiva es mantener su mente sobre el tema, sin ser apartado por ningún sonido, imagen, emoción o sensación, que pueda desviar su mente a través de
asociaciones. Usted deberá tener el vigoroso empuje que le lleve por encima de la tierra y que le mantenga en su dirección elegida. Por ende, usted desarrollará concentración y voluntad. Estas dos palabras son en realidad la causa y el efecto. La causa es la voluntad, y el efecto es la concentración.
EXTRAIDO DE LA CIENCIA DE LA MEDITACIÓN, TORKOM SARAYDARIAN,
MEDITACION PRACTICA: 5.- REGLAS PRÁCTICAS PARA LA MEDITACIÓN
Usted empieza su día después de cargarse con energías espirituales, y así enfrenta su vida diaria con luz, amor y poder mayores, y se consagra a una vida de servicio.
Somos el cuarto Rey Mago y Jesús espera que le encontremos en cada persona necesitada que se cruce en nuestro camino.